Martín Muñoz, un argentino que dejó su país en medio de la crisis económica del año 2000, ha logrado un éxito empresarial impresionante en Detroit, Estados Unidos. Su empresa, “Mr. Poronga”, se especializa en servicios de plomería y ha alcanzado una facturación anual de más de US$4 millones.
Martín, que estudiaba en la Universidad de San Francisco en Mendoza, decidió buscar nuevas oportunidades en Estados Unidos debido a las dificultades económicas en Argentina. Con el tiempo, se asoció con su hermano Gastón para fundar Munoz Realty, una empresa dedicada a la compra, venta y administración de propiedades.
Sin embargo, un conflicto laboral llevó a Martín a concebir la idea de una nueva empresa que brindara servicios de plomería. De manera humorística, decidió llamarla “Mr. Poronga”. Aunque el nombre puede llevar a malentendidos, la empresa se ha destacado por su profesionalismo y calidad en los servicios de plomería.
La empresa cuenta con un equipo de alrededor de 20 plomeros a tiempo completo y un empleado para atender las llamadas telefónicas. Mr. Poronga ha demostrado ser eficiente en una variedad de trabajos de plomería y emergencias.
El nombre peculiar de la empresa ha llevado a situaciones inusuales y divertidas, como la confusión de algunos clientes que esperaban a los plomeros desnudos. Martín reveló que las personas latinas comprenden el humor detrás del nombre, mientras que los estadounidenses a menudo recurren a Google para entender su significado.
A pesar de las situaciones cómicas, Mr. Poronga se ha convertido en la empresa de plomería más grande de Michigan y cuenta con Munoz Realty como su cliente principal, administrando más de cinco mil propiedades. Además, obtienen contratos significativos con la ciudad, incluyendo trabajos de reemplazo de líneas de drenaje y agua.
Martín Muñoz disfruta de la seguridad jurídica y las oportunidades que ofrece Estados Unidos, aunque extraña su país natal, Argentina. Espera que en el futuro, Argentina pueda brindar más oportunidades a sus ciudadanos y convertirse en la nación que se merece.



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