Si algo lo caracterizó al papa Francisco fue que estuvo cerca de quienes más los necesitaban. Tras su muerte se dio a conocer que él mismo pidió que el papamóvil sea reconstruido y utilizado como una clínica de salud para los niños de Gaza.
Según lo informó el sitio oficial Vatican News, la donación del mismo vehículo, que lo trasladó hasta el día de su funeral, fue su último deseo para estas personas con las que mostró tanta solidaridad a lo largo de su pontificado.
Es así que ahora el papamóvil atraviesa una reconstrucción significativa, en la que se lo está equipando con equipos de diagnóstico, exploración y tratamiento, incluyendo pruebas rápidas para infecciones, instrumentos de diagnóstico, vacunas, kits de sutura y otros suministros vitales.
La utilidad del mismo será accionada por los médicos y sanitarios, quienes llegarán a los niños en los rincones más aislados de Gaza una vez que se restablezca el acceso humanitario a la Franja.
En este momento, su transformación se lleva a cabo en Jerusalén, lugar al cual el Papa le confió la iniciativa a Cáritas. El pedido de Francisco era responder a la grave crisis humanitaria donde casi un millón de niños han sido desplazados.
Por su parte, el Vaticano argumentó sobre la donación: “En medio de la terrible guerra, el colapso de las infraestructuras, un sistema de salud desmantelado y la falta de educación, los niños son los primeros en pagar el precio, con hambruna, infecciones y otras enfermedades prevenibles que ponen sus vidas en peligro”.



and then