Izquierdoz tocó en el área a Marinho y ni Tobar ni el VAR consideraron que fuera penal. Desde el Peixe ya comenzaron un reclamo colectivo y advirtieron que pedirán los audios de la cabina.
No fue un partido con todas las luces. Se disputó más de lo que se jugó y apenas algunas acciones ofensivas se destacaron como situaciones claras de gol. Por eso terminó igualado en cero el primer chico entre Boca y Santos, aunque hubo una jugada puntual que pudo haber cambiado todo: la polémica del penal no sancionado.
La misma se desprende en tres partes, como una historia. El comienzo: Carlos Izquierdoz cruzó con la pierna derecha a Marinho dentro del área a los 30’ del complemento. Lo tumbó y todo el conjunto brasileño pidió penal. El nudo: Tobar -que no lo consideró foul- esperó al VAR, que chequeó y como definió que no fue, se cobró saque de arco. El desenlace: desde el Peixe se pronunciaron molestos con la decisión y reclamarán los audios de la cabina.
“Santos enviará una carta a Conmebol sobre el desempeño del VAR en el juego en Argentina para expresar su descontento con la actuación del VAR en el partido ante Boca”, comienza el descargo y agrega que “destaca la extrañeza por la no verificación del VAR en el borde del campo, en la jugada que Marinho fue derribado en el área rival en el segundo tiempo”.
“Me tocaron dentro del área. No sé por qué el árbitro no miró el video del VAR. Tranquilo, lo importante es sacar un resultado aquí. Podríamos haber ganado, pero jugar contra Boca es muy difícil”, señaló Marinho con la transmisión. También habló Cuca, el DT del conjunto paulista y afirmó: “Tuvimos una jugada decisiva, que fue penal a Marinho, sufre penal arriba y en el suelo. Pudo haber decidido el partido a nuestro favor”.
Desde Santos advirtieron que irán a las autoridades de Conmebol exigiendo respuestas acerca de por qué el juez principal no fue a observar la jugada. Cabe señalar que durante el torneo, la confederación sudamericana ya se anticipó a este tipo de demandas y publicó en varias ocasiones los diálogos entre colegiados. Lo único cierto es que se define el miércoles 13 en territorio brasileño y todo puede pasar.
