La investigación llevada adelante por los fiscales Marisa Monti y Claudio Oviedo, de la UFI Nº 5 del Departamento Judicial Morón, determinó que la niña “fue golpeada en varias oportunidades” y, entre otros actos de crueldad, “fue obligada a ingerir comida para mascotas”.
Incluso se investiga la configuración de otro delito debido al relato de uno de los menores que estaba en la finca en la que ocurrieron los hechos, que ingresó a la habitación cuando le estaba a punto de poner una almohada en la cara”.
En los allanamientos realizados el fin de semana, el imputado no fue encontrado y desapareció de los lugares que solía frecuentar. La madre de la menor víctima tiene una restricción perimetral de acercamiento dictada por el Juzgado de Familia Nº 1 de Ituzaingó.

Asimismo, se investiga si el acusado está vinculado a la comercialización de estupefacientes en la zona de Merlo y Moreno.