Unos 8.000 hinchas identificados con camisetas y banderas de la Argentina se reunieron en el centro de la capital española para celebrar el triunfo ante Francia que le dio al equipo de Lionel Messi la tercera Copa del Mundo para el fútbol argentino.
Al término del partido, grupos de hinchas se desplazaron hasta estación Sol del Metro madrileño para celebrar la ansiada Copa del Mundo, 36 años después de la última que había sido conquistada, en México 1986, de la mano de Diego Maradona.
En la Puerta del Sol había sido desplegado -antes del inicio del partido- un dispositivo formado por agentes de Unidades de Intervención Policial (UIP) para controlar a los hinchas argentinos y franceses.
Ya entrada la noche, comenzaron los incidentes cuando dos aficionados con camisetas argentinas escalaron el árbol de Navidad instalado en Sol.
Cerca de la medianoche hubo otro altercado fuerte en la calle Arenal, cuando hinchas argentinos lanzaron botellas y latas a los agentes policiales, quienes detuvieron a otro aficionado.
La policía informó que los arrestos fueron por delitos de desórdenes públicos, atentado y lesiones.