El gobernador del Chaco, Jorge Capitanich, anticipó que planea desdoblar las elecciones en la provincia de las nacionales, con lo cual las PASO serían en julio y las generales, el 17 de septiembre de 2023. Con esta decisión, estaría desacoplando los comicios para tener resuelta la cuestión local antes de las elecciones nacionales, y evitar de ese modo un arrastre negativo de la Casa Rosada.
Capitanich es un cristinista consumado, pero están en juego más que las lealtades. Luego de bajarse de la carrera presidencial, avisó que iría por su cuarto gobierno en Chaco. Y actuaría en consecuencia, lo mismo que su par de Tucumán, Osvaldo Jaldo, que ya dijo, con un año de antelación, que el adelantamiento electoral será un hecho en la provincia norteña. También el salteño Gustavo Sáenz avisó que en su provincia se votará el 16 de abril, y la rionegrina Arabela Carreras, si bien no definió fecha, remarcó que adelantará la convocatoria “para no quedar mezclados en una grieta que no nos representa”.
La idea del desdoblamiento va en línea con los diseños sobre los que trabajan desde hace tiempo muchos gobernadores peronistas, e incluso los opositores, para salvaguardar sus administraciones locales de los vaivenes del gobierno nacional, pues no es ninguna novedad que las provincias tienen mejor performance fiscal que la Nación, y eso puede traducirse en competitividad electoral, lo que constituye todo un activo en medio de la crisis económica y política que vive la Argentina.
Tucumán fue la primera provincia gobernada por el PJ que confirmó el desdoblamiento de los comicios, y se prepara para votar en junio de 2023. “Avisé con un año de anticipación. En junio dije que en el mismo mes de 2023 iban a realizarse los comicios”, remarcó el gobernador interino Jaldo, y de ese modo ratificó la decisión de adelantar la elección de autoridades provinciales con respecto a las presidenciales de octubre.
Más al sur, San Juan todavía no hizo un anuncio oficial, pero en la provincia creen que es un hecho que se desdoblarán las elecciones. Se votaría el primer fin de semana de julio de 2023, como en Chaco, solo que en esta provincia, muy probablemente se votará directamente en generales porque el oficialismo local derogó las PASO (asunto que está judicializado), mientras que avanzó con modificaciones en el régimen electoral para resolver sus cuestiones internas a través de un sistema de lemas. Es el punto de acuerdo entre el gobernador Sergio Uñac y el veterano jefe local, José Luis Gioja.
En Chubut todavía no se resolvió el desdoblamiento, pues el gobernador Mariano Arcioni dice que tomará la decisión después de diciembre. Especula con levantar su imagen y atarse a potenciales candidaturas como la de Sergio Massa, en caso de que el ministro de Economía decida lanzarse a la competencia arropado en algunos éxitos de gestión.
Córdoba, por su parte, vota en comicios desdoblados hace varias elecciones, por lo que podría ser el caso nuevamente el año próximo. Por el momento no hay fecha, pero sí quienes especulan con que podría ser en mayo. El tema, de todos modos, no es parte de la agenda de estas horas. El gobernador Juan Schiaretti viene de sufrir un duro golpe electoral, tras la derrota a manos de Juntos por el Cambio en Marcos Juárez.
En Santa Cruz y como parte de una estrategia electoral, Alicia Kirchner adelantó las elecciones de gobernador en 2019 y las hizo coincidir con las PASO. Dejó para octubre las categorías municipales. Para 2023 el tema aún no está en agenda, pero podría estarlo en breve si todos estos movimientos preliminares continúan. Allí, además, está en vigencia una ley de lemas.
En Misiones aún no confirmaron la fecha de votación, pero todo parece indicar que adelantarán la elección provincial como viene ocurriendo en los últimos años. La Renovación profundiza su estrategia de apartarse de la grieta para proteger las contiendas locales. En la provincia creen que 2023 no será la excepción.
Después hay provincias que históricamente votan antes que las elecciones nacionales, como el caso de Catamarca, que acostumbra a abrir el cronograma electoral con votaciones en marzo.
La excepción sería la provincia de Buenos Aires, donde no hay por el momento propuesta para desdoblar comicios. El gobernador Axel Kicillof se mantiene en silencio, pero cerca suyo dijeron a LA NACION que “en este momento no estamos evaluando alternativas electorales”. “La realidad es que la provincia nunca desdobló”, afirman. Sucede que la provincia mantiene su suerte amarrada a los destinos nacionales, y su condición gigante en materia electoral, paradójicamente, limita de algún modo su autonomía política.