La magistrada está acusada de prevaricato, estafa y cohecho pasivo en una causa y cohecho en otra. Durante la declaración, Illanes Bordón se negó a mostrar su rostro y mantuvo apagadas las cámaras de zoom. Calipo destacó que la magistrada había realizado compras ilegales de divisas extranjeras y que había intentado ocultar su participación en los hechos.
Calipo también mencionó que la magistrada se descompensó al escuchar la acusación y que nadie la vio cuando dijo que le salía sangre de la nariz. Además, destacó que la magistrada había estado evitando la audiencia durante 5 meses alegando problemas de salud.
El doctor Calipo aseguró que seguirá luchando para que se haga justicia y que no se permita que la magistrada se salga con la suya. “No vamos a ceder un centímetro, vamos a llegar hasta el último paso, pase lo que pase”, dijo.
La denuncia penal contra la magistrada destaca serias preocupaciones sobre el abuso de poder y la integridad dentro del sistema judicial. Calipo había presentado las denuncias contra la magistrada ante el consejo de la magistratura, que es el mismo consejo que debe promover el desafuero.