Después de la esperada vuelta de Mirtha Legrand este sábado a la noche, Juana Viale debutó como conductora de los emblemáticos almuerzos. Y de entrada, la nieta de la diva quiso dejar en claro que es la nueva dueña del ciclo de los domingos al mediodía en El Trece.
“Bienvenidos a mi primer programa”, dijo Viale cerca de las 13.50, como para que no queden dudas de que ya no es sólo un reemplazo de la abuela Mirtha, sino una conductora con vuelo y programa propio.
Vistiendo un conjunto de Gino Bogani verde lima con un pantalón de paillette, camisa abierta y mangas de gasa y seda natural, la flamante anfitriona bailó al ritmo de la nueva cortina del Almorzando con Juana, compuesta por la ex Bandana Valeria Gastaldi -hija del empresario y ex marido de su madre, Marcela Tinayre- a quien definió como “una hermana del alma”.
De entrada, Viale se mostró muy nerviosa, en un primer cuarto de hora de ciclo caótico y algo incómodo: bailó para llenar huecos y pidió agua a la producción en una presentación que pareció extenderse más de lo pautado.
“Me dijeron que diga todo lo que está pasando”, confesó Viale en complicidad con alguien de atrás de cámara, en otro intento por controlar sus nervios.
Luego nombró a algunos de los que le enviaron flores por su estreno (Maluma, Martín Cabrales y su hermano y productor, Nacho Viale) y bromeó: “Algún ramo debe haber quedado de ayer para Mirtha”.
“Yo pongo la cara, pero mi equipo me contuvo. Gracias a mi hermano, y me encanta ahora porque es mi programa”, le dijo a Nacho.
Y volvió a acordarse de su abuela para agradecerle, y a la vez distanciarse de esos reemplazos en pandemia: “Y por supuesto agradezco a mi abuela, que me cedió su trono, gracias, fue un placer haber estado en los dos ciclos”, añadió.
El Martín Fierro con lechuza y su primera mesa
En un escritorio con fotos de ella con sus perros, Viale dejó el Martín Fierro a Mejor conducción femenina que ganó en 2021. Pero antes expuso un detalle que apuntó a sus detractores: de la estatuilla colgaba una lechuza “para que no la lechuceen”. Otro gesto que pareció decir, “yo ya tengo el mío”.
Cuando estaba por presentar a Pampita, su primera invitada, Viale recordó que todavía faltaba mostrar su nueva casa, el estudio Cuyo: recorrió el living -caminó por encima del sillón, ¿le habrá molestado a la abuela?- y el escenario donde se llevarán a cabo los cierres musicales; y se acercó a la cocina para presentar a Jimena Monteverde, la chef que cocina el menú de ambos ciclos.
Entonces llegó la presentación de los invitados. Con Ardohaín, a quien definió como una “mannequin”, se fundió en un largo abrazo. Pasó el cantante de cumbia El Polaco, el periodista especializado en policiales Rolando Barbano y Guillermo Cóppola.
Ya sentada en la cabecera con sus cuatro invitados, una Viale más relajada soltó: “Bienvenidos a mi mesa”, enfatizando en el pronombre personal.