El acuerdo entre el Gobierno nacional y el Fondo Monetario Internacional desató una nueva crisis interna dentro del Frente de Todos. A la renuncia de Máximo Kirchner y la crítica de diversos dirigentes del oficialismo, se sumó la presidenta de la Asociación Madres de Plaza de Mayo, Hebe de Bonafini.
A través de una carta, la referente cuestionó el acuerdo y señaló: “No nos escucharon. El Gobierno acordó pagarla a pesar de todo, con el mazazo al corazón de todos los que menos tenemos”.
“A pesar de nuestro intenso trabajo de 45 años de lucha, de todas nuestras marchas (casi 3.000), no logramos no pagar la deuda externa, que no es nuestra”, añadió.
En el texto, publicado en la cuenta de Instagram de Madres de Plaza de Mayo, expresó: “A nuestros compañeros y compañeras de la Plaza, de los barrios, especialmente a los que viven esperando un plato de sopa, una chapa más para que no se les llueva la casilla, y esperan poder enviar a sus hijos a la escuela y conseguir una changuita; a todos los que cobran sueldos miserables; a todos los condenados a vivir en las sucias veredas de la ciudad; a todos los compañeros y compañeras de los barrios marginales, sin agua, sin cloaca, sin luz: quiero pedirles perdón, perdón de rodillas”.
“Perdón, sí, perdón de rodillas, porque a pesar de todo no nos escucharon”, concluyó.
El acuerdo entre el Gobierno y el FMI abrió nuevas grietas dentro del frente opositor. Sólo 72 horas después del anuncio realizado por el presidente Alberto Fernández, Máximo Kirchner presentó su renuncia a la presidencia del bloque del Frente de Todos en la Cámara de Diputados. Esto no sólo expone nuevas divergencias dentro de la coalición gobernante, sino que supone un problema que puede resultar aún más grave.
Es que por una iniciativa impulsada por el oficialismo, el eventual acuerdo que se firme con el Fondo deberá ser aprobado por el Congreso. En medio de estas discrepancias, ¿cómo votará el Frente de Todos en el Congreso?