Los objetos fueron descubiertos durante los últimos meses frente a las costas de Cesárea, ubicada entre las ciudades de Tel Aviv y Haifa, donde dos barcos se hundieron hace 1.700 y 600 años, respectivamente, señaló la Autoridad de Antigüedades Israelí (AIA).
Entre centenares de objetos se destaca un anillo octogonal de oro, con una gema verde engarzada y grabada con la imagen de un joven pastor con túnica, con un carnero u oveja en sus hombros, que data del Imperio Romano y que por su tamaño estiman que “habría pertenecido a una mujer”.
La responsable de conservación de piezas de la AIA, Helena Sokolov, aseguró a la agencia de noticias AFP que la imagen del Buen Pastor, que representa a Jesucristo como un guía de su pueblo, “es muy poco frecuente en un anillo aunque está muy extendida en el arte cristiano”.
El descubrimiento de esta alhaja frente a las costas de Cesárea se explica porque esta ciudad fue la capital local del Imperio Romano en el siglo III y su puerto era clave por entonces, indicó Sokolov y añadió que “el cristianismo vivía aún sus inicios” en aquella época, pero era “muy evidente que se estaba desarrollando, sobre todo en ciudades mixtas como Cesárea”.
La AIA también recuperó centenares de monedas de plata y bronce que datan de la época romana, y otros cientos del siglo XIV, precisamente de la época mameluca, además de una piedra preciosa roja, junto a objetos en cerámica y pequeñas figuras.
Fuente: Télam