Gonzalo Muñoz sufrió un serio accidente en Bolivia mientras estaba de gira con Los Wachiturros.Los miembros de la banda advierten que el músico está muy grave y deben operarlo de urgencia: “la cirugía cuesta 15 mil dólares”.
Con el fin de reunir el dinero, la banda que lidera Gonzalito abrió una cuenta. Al parecer, Muñoz cayó de espaldas y sufrió un fuerte golpe en su cabeza.

“Hagamos una cadena de oración por Gonzalito, está en estado de gravedad, estamos en Cochabamba.Si no se opera tiene riesgo hidrocefalia“, dicen los integrantes de Los Wachiturros.
Por su parte, el periodista Juan Etchegoyen usó su cuenta de Twitter para alertar sobre lo sucedido con Muñoz.
Gonzalito de Los Wachiturros se cayó del escenario y pelea por su vida: piden cadena de oraciones | Ciudad Magazine https://t.co/etV1EBdW9l
— Juan Etchegoyen (@JuanEtchegoyen) October 25, 2022
“Atención. Gonzalito de Wachiturros se cayó del escenario en medio del show que estaba dando en la ciudad de Cochabamba en Bolivia. Cadena de oración. Está muy grave me cuentan. Ojalá pueda recuperarse”, escribió.
Un ex Wachiturro relató su nueva vida como pastor evangélico: de la fama y las drogas a la Iglesia
Lucas “Kaká” Caballero cumplió el sueño de alcanzar la fama mundial siendo tan solo un adolescente. Apenas surgieron, los Wachiturros conquistaron las pantallas y los parlantes e impusieron su propio estilo para siempre. En el piso de Nosotros a la mañana (eltrece), Lucas repasó su historia y hasta se tiró unos pasos. “Nosotros tuvimos fama de verdad”, destacó.
“No le encontraba sentido a la vida ni a todo lo que hacía: El día que fuimos a lo de Susana Giménez hicimos el pico de rating más alto, superando a Justin Bieber. Llegué a mi casa y me puse a llorar”, reveló, con la marca de las luces todavía en los ojos.
En un intento por conectarse con su espiritualidad, al llegar del estudio de televisión se arrodilló y agradeció que iba a conocer Europa. Y no pudo terminar la frase porque le agarró un nudo en la garganta, que interpretó como una señal de Dios.
Luego, lo invitaron a la iglesia. Tras dejar los prejuicios y el resentimiento que sentía, pudo escuchar la palabra del pastor y sintió que estaban hablando de su vida. “Cuando uno realmente se atreve a probar a Dios… Él es un experto en cerrarle la boca a cualquiera. A mí no me la contó nadie. Yo lo experimento a Dios y a través de eso trato de dar un mensaje a los jóvenes de esta generación”, cerró.