“Hemos tenido un incremento en las consultas e internaciones en clínica médica”, confirmó el profesional, aunque aclaró que “los ingresos a terapia intensiva siguen siendo los menos y no ha aumentado el número de internados graves”, lo que lleva cierta tranquilidad a las autoridades sanitarias.
Frente a este panorama, Goitea recordó que las recomendaciones son las mismas que se aplican cada temporada invernal: uso del barbijo en espacios cerrados, en especial para mayores de 65 años y personas con comorbilidades; lavado frecuente de manos; y ventilación adecuada de los ambientes. Además, fue enfático al señalar que “las personas que presentan síntomas o signos de alguna patología respiratoria deben usar barbijo de forma obligatoria”.
Uno de los puntos que más preocupa al sistema de salud es la baja adhesión a la campaña de vacunación antigripal. “La vacuna está disponible, es gratuita, pero lamentablemente la gente no se la aplica”, lamentó el director del hospital, al tiempo que reiteró la importancia de la inmunización para prevenir complicaciones y reducir la carga sobre el sistema sanitario.
En paralelo, desde esta semana rige la obligatoriedad del uso de barbijo en edificios municipales, medida que generó un fuerte aumento en la demanda de este insumo y causó faltantes en varias farmacias de la ciudad. El barbijo clásico se comercializa a $150 en cadenas grandes, aunque muchas de ellas ya reportan quiebre de stock. En comercios barriales, en tanto, los valores oscilan entre los $350 por unidad y $2.450 por cajas de 50 unidades.
Las autoridades sanitarias reiteraron el llamado a no relajarse: “Los virus respiratorios siguen circulando con fuerza durante el invierno y el cuidado individual es clave para evitar contagios masivos”, concluyó Goitea.