Con un tipo de cambio claramente desventajoso, el turismo internacional receptivo vive un momento de fuerte retracción respecto de los años anteriores y los argentinos que viajan al exterior aumenta de manera considerable.
Tras los meses estivales, donde la balanza turística mostro un fuerte déficit, durante el mes de abril continuó la tendencia aunque manera menos marcada.
Según los últimos datos del Indec, ingresaron al país 699.300 visitantes no residentes por todas las vías de acceso, de los cuales 418.800 fueron turistas y 280.500 fueron excursionistas (es decir, personas que permanecen en el país menos de un día). En total se produjo una baja interanual de 8,3% en la recepción de turistas.
Las salidas de argentinos al exterior, en tanto, llegaron a 1.425.600 también por todas las vías internacionales. De ellos 881.200 fueron turistas y 544.400 fueron excursionistas. De esta forma, se registró un saldo negativo de 726.300 visitantes internacionales. Con un aumento interanual en el flujo de salidas de un 30,5%, aunque repartidos en 24% para turistas y 42,7% de aumento en excursionistas, lo que habla de un considerable crecimiento del turismo de frontera para compras de bienes.
El 18,7% del turismo receptivo llegó desde Uruguay; el 18,5% de Brasil y el 15%, de Europa. En cuanto al turismo emisivo, el 77% se dirigió a países limítrofes. Los principales destinos fueron Brasil, con 26,8%; Chile, con 24,6%; y Paraguay, con 11,5%.
El 51,0% de los turistas residentes salieron del país por la vía terrestre; el 41,6% lo hicieron por vía aérea; y el 7,5% optaron por la vía fluvial/marítima.