En mis viajes de trabajo, me cruce a Doña Rosa de 80 años caminando descalza por la ruta con una carretilla llena de leña, la lleve hasta los colorados, y pude ver como vive, en una pobreza extrema. Conseguí alimentos, ventilador, cocina, todas fueron donaciones de distintas personas, no pertenezco a ningún espacio político. Queremos cambiarles estas fiestas a esas 40 familias que viven en ese pueblito, que está a 40 km de Patquía, departamento Independencia
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