Según informó Marina Calabró en el programa El Diario de Mariana, fuentes cercanas al actor chileno aseguran que nunca lo habían visto tan molesto con su ex pareja. El motivo principal de su enojo radica en un viaje que Suárez realizó a Turquía con sus hijos, extendiendo su estadía más allá de lo acordado, lo que habría alterado los planes de Vicuña para compartir tiempo con los niños.
Este episodio se suma a una serie de desencuentros previos. En mayo, Vicuña había solicitado a Suárez que permaneciera en Buenos Aires para cuidar a sus hijos menores mientras él viajaba con su hijo mayor, Bautista, a un evento de Fórmula 1 en Miami. A pesar de haber aceptado inicialmente, Suárez emprendió un viaje a Miami con su pareja, Mauro Icardi, lo que generó un profundo malestar en Vicuña.
Además, se han reportado otros incidentes que reflejan la tensión entre ambos, como una discusión en el Aeroparque Jorge Newbery debido a problemas con los permisos de viaje de sus hijos. Estos conflictos han sido objeto de atención mediática y han alimentado la percepción de un deterioro en la relación entre los actores.
A pesar de estos desencuentros, Vicuña ha manifestado públicamente su deseo de mantener la privacidad respecto a los asuntos familiares y proteger la intimidad de sus hijos. En declaraciones a la prensa, expresó: “Las cosas se resuelven a puertas cerradas, en casa, con cierta intimidad y para preservar a los chicos, que es lo más importante”.
La situación actual plantea desafíos significativos para ambos en su rol de padres, y la resolución de estos conflictos será crucial para el bienestar de sus hijos y la estabilidad familiar.