La policía tomó conocimiento, mediante un llamado telefónico, de un vecino que fue a visitarlo y no lo encontró en su domicilio, ni pudo dar con él en los alrededores del lugar.
Cuando notó su ausencia, de inmediato comenzó a buscarlo por los alrededores no obteniendo resultado alguno. Ante esta situación, acudió en ayuda de otro vecino que vivía a 9 kilómetros del lugar.
Cuando se puso oscuro, y comenzó a lloviznar, dieron aviso a las autoridades policiales. Por lo que a las 6 partió una comisión policial al lugar, conjuntamente con personal municipal para emprender la búsqueda.
Fue encontrado a unos 500 metros de la casa ya sin vida, aparentemente sin signos de violencia o golpes, por lo que se estima que falleció por causas naturales.