La decisión de integrarlo al plantel que partió hacia Kuala Lumpur se produce en un contexto de tensiones con el entrenador Rubén Amorim y señales que apuntan a un inminente cambio de rumbo en su carrera profesional.
La relación entre Garnacho y el cuerpo técnico del Manchester United se ha visto deteriorada tras la final de la UEFA Europa League, en la que el equipo fue derrotado por el Tottenham Hotspur. El jugador expresó su descontento por la falta de minutos en dicho encuentro, lo que generó malestar en el entrenador Rubén Amorim. Como consecuencia, Garnacho fue excluido de la convocatoria para el último partido de la Premier League frente al Aston Villa.
A pesar de su inclusión en la gira asiática, fuentes cercanas al club indican que Garnacho no forma parte de los planes de Amorim para la próxima temporada. El entrenador habría comunicado al jugador su disposición para que busque un nuevo destino, en el marco de una reestructuración del plantel tras una temporada sin títulos y sin clasificación a competiciones europeas.
Adicionalmente, un mensaje publicado en redes sociales por Eva García, pareja de Garnacho, en el que se leía “último partido” junto a una imagen del jugador, ha alimentado las especulaciones sobre su salida del club.
Interés de otros clubes y futuro incierto
Diversos clubes han mostrado interés en fichar a Garnacho, entre ellos el Chelsea, el Napoli y equipos de la Premier League y la Saudi Pro League. El Manchester United estaría dispuesto a negociar su traspaso por una cifra cercana a los 60 millones de libras esterlinas, fondos que podrían ser utilizados para financiar la incorporación de nuevos jugadores, como el delantero del Brentford Bryan Mbeumo.
Mientras tanto, Garnacho continuará con la pretemporada en Asia y, posteriormente, se unirá a la selección argentina para disputar la doble fecha de las Eliminatorias Sudamericanas. Su futuro en el Manchester United permanece incierto, y se espera que en las próximas semanas se definan los pasos a seguir en su carrera profesional.
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