El ministro de Seguridad de Tucumán, Eugenio Agüero Gamboa, confirmó este martes que el gobernador local, Osvaldo Jaldo, junto a un juez y tres fiscales de la provincia, recibieron amenazas en su teléfono personal el lunes por la tarde. Por ese motivo, hay 97 personas detenidas preventivamente y se encontró al autor de las intimidaciones, a quien vincularon a una organización narco
“El autor de las amenazas -Miguel Eduardo “Miguelón” Figueroa- tiene dos sentencias por homicidio y esperando un juicio y hoy se encuentra en un penal de Marcos Paz en una cárcel federal por lo cual marca el hecho de que pertenecía a un grupo que vendía droga y mata a jóvenes, algo que no tiene vuelta para muchos, si para otros que logran recuperarse”, manifestó Agüero Gamboa en diálogo con un canal local.
Según comunicaron desde la Provincia, Figueroa fue condenado a prisión perpetua por un doble homicidio en Villa 9 de Julio y en septiembre de 2024 fue trasladado a una prisión federal en Buenos Aires. Para el ministro de Seguridad tucumano, “esto indica que la lucha contra el narcotráfico está dando su resultado”. “Redoblaremos los esfuerzos para seguir trabajando y poner a los delincuentes ante la Justicia”, enfatizó.
Por su parte, el jefe de la Policía de Tucumán, Joaquín Girvau, explicó que se trató de “una amenaza por WhatsApp hacia el gobernador de la provincia, algunos fiscales y jueces, por parte de un delincuente que fue condenado a perpetua”.
“Por esta gestión fue trasladado y juzgado en Tucumán por nuestros fiscales y jueces y fue nuestro gobernador el que decidió trasladarlo a una prisión de máxima seguridad en Buenos Aires”, agregó el uniformado, que luego sentenció: “Que sepan él, sus amigos y su familia que la Policía no va a permitir que pasen estos tipos de hechos”.
De acuerdo a información de La Gaceta, el presidiario vinculado a la red narco se puso en contacto desde la cárcel con una mujer que grabó un mensaje donde advertía que algo malo podría sucederle a los hijos de Jaldo, del juez de Ejecución, Gonzalo Ortega, y los fiscales Pedro Gallo, Carlos Sale e Ignacio López Bustos.
“Sin duda tiene que haber salido del penal (el audio). Eso ya será materia de investigación. No podemos tolerar que este tipo de situaciones, no nos podemos quedar de brazos cruzados”, enfatizó el policía Girvau, y remarcó: “Vamos a ir con todo el personal policial, con todas las unidades especiales a trabajar en el terreno directamente como hicimos anoche, como vamos a hacer hoy y todos los días hasta que caiga preso del primero al último al que tuvo la idea y al que lo envió”.